El tema de febrero me mueve especialmente porque es algo que he vivido en primera persona y que, contra todo auto-pronóstico, he resuelto hace no mucho. Llegó un momento en el que di por hecho que jamás me libraría de ese patrón, que era una especie de maldición. Pero no es así.
En el amor, como en el resto de áreas, se puede aprender, generar nuevos recursos y cambiar tus comportamientos para cambiar tu realidad. En ningún caso diré que es fácil. Me parece, sin lugar a duda, el mayor reto personal al que me he enfrentado, después del melón de los padres. Que viene a ser lo mismo, por cierto, pero de esto hablaremos más adelante. Poco a poco, que no queremos atragantarnos.
La experiencia con amigas, suscriptoras y coachees, además de los numerosos estudios que lo corroboran, dejan clarinete que el amor en general y, en concreto, el amor de pareja, es una de las mayores causas de nuestro sufrimiento. En muchas mujeres. Y en muchos hombres.
Es, también, el mayor anhelo humano.
La última semana he estado dándole vueltas a una idea sobre la forma de abordarlo. La deseché por no salirme de la estructura y, sobre todo, por no sentar precedentes y desequilibrar la balanza de dar y recibir, pero me he despertado a las cuatro de la mañana sabiendo que quiero llevarla a cabo.
Así que.
Este mes va a ser ligeramente diferente. En marzo, lo contratado en la suscripción seguirá siendo lo que especifica ESTA página. Importante dejarlo claro para que nadie se confunda.
Y ahora, para las personas que estáis dentro.
Largo y Tendido, el contenido en texto del mes, es ficción. Me hace muchísima ilusión permitirme, por fin, la novela. En principio iba a hacer solo una publicación muy larga, pero quiero lograr un viaje a nivel psicológico y, para ello, voy a dividirla en cuatro partes. Enviaré una cada semana, además del resto de contenido que marca el calendario. Mañana recibiréis la primera parte. Y como ya sabéis, cero estrés. Tenéis el archivo completo mientras estéis suscritas.
Calma y a vuestro ritmo.
Para abrir el melón quiero que veáis esta charla de quince minutos de Arun Mansukhani sobre la dependencia emocional. Iba a formar parte del Chupito anterior, sin embargo, el riesgo de que se diluyera era demasiado alto. Para las personas que no estáis dentro de la suscripción, os la recomiendo igualmente. Me parece espectacular.
Este mes no hay libro que leer.
Lo cambiamos por los mini capítulos de Largo y Tendido.
Es importante que la veáis con atención e intención para que podáis entrar en febrero desde otro ángulo y con estos conceptos fundamentales bien presentes.
Mañana os mando la primera parte.
Principio.
Ana.
Vamos allá con este nuevo mes ✨🐆 me encanta que te hayas escuchado y lo recibamos en ficción. Creo que puede conectar mucho.
Hace unos días he dejado un puesto importante de trabajo, porque he decidido no gastar ni una semana más de mi vida ahí. El trabajo era bonito pero no para mí en estos momentos.
Así que, ahora me doy un tiempo para criar a mi hijo de acuerdo a mis valores y no completamente estresada. Para descansar y apostar por proyectos que estén en coherencia con mi nueva vida.
Efecto vida me ha inspirado mucho 🙏 no me quiero imaginar el resto del año jijiji viene mambo ✨
"Depended unos de otros pero depended de forma sana". Me quedo con esto. Como en tantos otros asuntos de la vida, la dependencia emocional es otro de los goles que "el sistema! nos quiere colar por la escuadra. Los humanos somos seres sociales por naturaleza, pero claro, cada vez estamos más desconectados de la naturaleza y, por tanto, de nosotras mismas, como humanas. Es la negación del diseño humano. Una de las preguntas claves para mí en este sentido es ¿a quién le interesa hacernos independientes emocionales? ¿para qué nos quieren tan independientes? Lo primero que nos viene a la cabeza es para aislarnos emocionalmente. Y un humano aislado es un humano perdido.
Nuestros ancestros vivían en manada porque sabían que era la única manera de sobrevivir. En nuestro mundo moderno cada vez hay menos tribu. Tal vez por eso muchas estemos aquí. Por esa necesidad de pertenencia. Porque es innegable que necesitamos ser interdependientes emocionales.
No hemos empezado febrero y solo por esta charla TEDx ya ha merecido la pena. Gracias Efecto Vida. Espero mañana ansiosa mi dosis de interdependencia! ;)